Reseña: El libro secreto de Flora Lea - Patti Callahan Henry

El libro secreto de Flora Lea || Patti Callahan Henry

Maeva || Abril 2025
472 páginas || Papel y ebook

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Una novela cautivadora sobre el vínculo entre hermanas, las complicaciones del amor y la magia duradera del poder de los cuentos y las historias.

1939. Hazel, de catorce años, y su hermana Flora, de cinco, son enviadas a la campiña inglesa para escapar de las bombas que caen sobre Londres. Para olvidar los horrores de la guerra, la hermana mayor inventa un cuento de hadas sobre una tierra mágica, un lugar secreto al que poder escapar de la realidad y que solo les pertenece a ellas. Pero un día, Flora desaparece sin dejar rastro.
1960. La vida de Hazel da un vuelco cuando recibe en la librería en la que trabaja un libro ilustrado titulado como aquel cuento: Whisperwood y el río de estrellas. Sin embargo, Hazel está segura de que nunca ha mencionado esta historia a nadie. ¿Podría el libro contener los secretos de su desaparición y ser una señal de que su hermana sigue viva?
A medida que Hazel se adentra en el misterio, se verá obligada a confrontar su pasado y a desentrañar los secretos que han permanecido ocultos durante años.

 

Hazel y Flora son dos hermanas que tienen que dejar todo atrás, incluida su madre, para ponerse a salvo en la campiña inglesa mientras la guerra amenaza con bombardear y destruir su Londres natal. Como tantos otros niños en esa época, son trasladadas hasta un lugar desconocido y elegidas por una familia para compartir sus días. Dentro de lo malo, ellas tienen suerte, porque no las separan y terminan conviviendo con Bridgette y Harry Aberdeen, madre e hijo respectivamente, cariñosos y buenos, que las tratan como si siempre hubieran formado parte de su familia. Las semanas y los meses van pasando, y Hazel se encarga de crear un mundo imaginario al que ambas puedan escapar cuando lo necesiten, un cuento de hadas que hace que el dolor sea menor, al menos hasta el día en el que Flora desaparece. 20 años después, Hazel trabaja en una librería, tiene un novio que la adora e intenta vivir una vida tranquila olvidando el dolor del pasado, pero un libro, llamado como el cuento de hadas que inventó para su hermana, llama su atención un día y hace que todo a su alrededor se derrumbe y los recuerdos del pasado la atormenten y vuelvan como un huracán. ¿Puede ese libro ser la señal de que su hermana está viva? ¿Quién sino podría haberse inventado la misma historia y el mismo lugar de no ser así?

Contar historias es uno de los mayores poderes que poseemos. Es como un sueño que puedes llenar con lo que quieras. Y no siempre el caballero tiene que salvar a la princesa; a veces, ella se salva sola. 

'El libro secreto de Flora Lea' es una historia desgarradora sobre la pérdida, el dolor y el duelo, pero manteniendo siempre la esperanza de que las cosas no sean como en su momento parecieron ser. Porque cuando alguien desaparece sin dejar rastro, sin explicación, sin encontrar pistas que descubran lo que sucedió, siempre te queda la duda y los "y si", y aunque Hazel se ha esforzado en superar lo ocurrido, siempre ha creído en la posibilidad de que su hermana estuviera viva. Esa hermana casi diez años menor a la que le contaba una historia inventada, para la que creó todo un mundo imaginario al que escapar cuando todo a su alrededor se desmoronaba. Dicho mundo, admito que me ha recordado al de 'Un puente hacia Terabithia', y es que ambos son un refugio, un salvavidas, un modo de afrontar una vida complicada y triste.

Nada de eso estaba en mi idea original. Nunca pretendí que mi cuento fuera una historia con moraleja. Whisperwood era un lugar maravillo, mágico, un refugio para nosotras en medio de un mundo que ardía a nuestro alrededor. 

Nos encontramos con un libro que sigue dos líneas temporales, la de las niñas en plena Segunda Guerra Mundial, tanto junto a su madre como después junto a los Aberdeen, y la de Hazel en 1960, con una vida feliz, soñando con alcanzar nuevas metas, un novio al que quiere y la quiere, y un trabajo que le gusta mucho, pero que está apunto de cambiar por otro que cree que va a llenarla más. Entre un tiempo y otro han pasado 20 años, y aunque pueda parecer que la Hazel del presente ha superado todo lo que le ocurrió en el pasado, para nada es así. Es una historia que nos habla de cómo afrontar un dolor tan profundo que hace que quieras olvidar todo lo que te recuerde a ello, incluidas las personas a las que quieres pero hacen que te sientas culpable por tus distracciones, por no estar pendiente de quien debías estarlo. Porque este libro también nos habla del amor, no solo de las hermanas, que es seguramente la relación más estrecha e íntima que puede existir, sino también el maternal, el de la familia que te escoge, o incluso el primer amor adolescente, cuando llega en un momento en el que todo es destrucción y sufrimiento. Y la autora ha sabido cómo hablarnos de todo ello para poder entender a los personajes, y me ha encantado.

Según Tolkien, el objetivo de un cuento de hadas, si es que se puede decir que está hecho para conseguir algo, es darnos una nueva perspectiva de nuestro mundo, el consuelo de un final feliz. Una especie de recuperación. Como si abandonáramos ese mundo para ver el nuestro con otros ojos. 

Y es que no os lo había dicho hasta ahora, pero el libro me ha fascinado, emocionado, roto en mil pedazos y recompuesto después, y se ha convertido en una de mis mejores lecturas de este año, sin duda alguna. Y os aseguro que siempre me cuesta decidirme a leer libros ambientados en la guerra, la que sea, porque no soy muy de historia, lo reconozco, pero todos los que he terminado leyendo de esa época, se han convertido en libros inolvidables para mí (Sangre y corazón, Un día de invierno, El ruiseñor, Una promesa de juventud, En tiempos de guerra...), porque tienen un punto dramático pero de esperanza al mismo tiempo que me encanta, y me encoge el corazón y al final hace que termine el libro con una sonrisa, pese a todo lo que he sufrido mientras lo leía. Y este no ha sido una excepción, porque se sufre, se sufre mucho con la historia de Hazel y Flora, pensando en qué harías tú en su situación, viviendo todo lo que ellas viven y, encima de todo ello, perdiéndose la una a la otra, sacudiendo esa unión que existe entre hermanas que es irrompible pese a que una de ellas ya no esté.

El dolor nos hace inventar historias. Lo hacemos para poder vivir en un mundo que tenga sentido. Yo te contaba historias. Bailábamos al son de las historias. Yo las creaba junto al fuego o sentada a esta misma mesa. Lo que hiciste, imaginarte un universo para Flora y para ti, os proporcionó consuelo en un momento aterrador. Querida Hazel, no siempre se puede hallar culpables de las desgracias que nos ocurren. 

Por otro lado, esta historia nos habla también de la literatura, de cómo los libros se convierten en nuestro lugar seguro cuando todo lo demás nos falla, o cuando sufrimos, o cuando necesitamos una vía de escape que nos haga olvidar todo a nuestro alrededor. Así que se disfruta aún más porque las niñas protagonistas, sobre todo Hazel, comparten con nosotros ese amor por la lectura, y por inventar cuentos e historias, y es maravilloso poderse sentir identificada en algún punto con la protagonista del libro que estás leyendo. La autora ha sabido transmitir no solo el sufrimiento por todo lo que ocurre a lo largo de la historia, o el amor que os comentaba antes, sino también esa ansiedad por escapar entre las páginas de un libro o a través de la imaginación a un mundo imaginario en el que nada malo puede ocurrir. La seguiré leyendo seguro, porque me ha encantado su manera de narrar. 

Fuente

En resumen, 'El libro secreto de Flora Lea' es una historia dura, pero llena de esperanza. Un libro que se ambienta en un momento de nuestra historia que nunca debió ocurrir, como cualquier otra guerra, en la que miles de niños tuvieron que dejar sus hogares y familias para seguir vivos, sin saber si algún día podrían volver. En él tenemos a dos hermanas como protagonistas, Hazel y Flora, siendo la primera a la que más conocemos, tanto en el pasado como en el presente, porque el libro está contado en dos líneas temporales. Cuando Flora desaparece sin dejar rastro, Hazel se siente culpable, y todo su mundo termina derrumbándose y ella alejándose de las personas que la habían acogido y cuidado cuando más lo necesitaba, pero no puede mirarlas a la cara sin recordar el dolor por la pérdida de su hermana. Es un libro en el que la imaginación es muy importante, así como el poder de crear mundos imaginarios a los que escapar cuando más lo necesitas, y que aunque es duro por lo que nos relata, también mantiene viva esa llama de esperanza de que todo puede ir mejor. Os lo recomiendo si os gustan las historias familiares, con secretos, pérdida, duelo, mucho amor y un punto de esperanza, o aquellas que se ambientan en la guerra, con todo lo que ello conlleva.

Las mejores historias alimentan el alma. Pero las que no contamos sobre nosotros mismos, e incluso las despectivas que otros cuentan sobre nosotros, pueden destruir esa alma. Tenemos que elegir lo que es bueno y cierto, no lo que sirve para hacer daño.

 

Gracias a la editorial por el ejemplar